La Ertzaintza confirma la denuncia interpuesta hace unos días

DURANGO | La empleada de un comercio de Durango cayó la semana pasada en la trampa de una estafa telefónica. La afectada quiere alertar a la comarca de la situación que vivió para que no se repitan en otros establecimientos.

Los estafadores, haciéndose pasar por empleados de empresas de envíos, contactan con los empleados de estos establecimientos para informarles sobre la llegada de un supuesto envío que requiere un pago inmediato para su recepción. Para dar credibilidad a su engaño, los criminales incluso simulan conversaciones telefónicas con los jefes de los trabajadores, instándolos a realizar el pago a través de tarjetas prepago.

Para mantener la comunicación bajo su control, los estafadores solicitan el número de móvil del empleado, ocupando así ambas líneas del establecimiento, la fija y la móvil. Las víctimas son apremiadas a comprar tarjetas de prepago en lugares como estancos, quioscos y supermercados, y a enviar rápidamente los códigos de activación mediante fotografías.

En Durango a la víctima, empleada de un comercio de Durango, le estafaron cerca de 1.600 euros. El mismo día, tras lo ocurrido, presentaron la denuncian ante la Ertzaintza que ha abierto una línea de investigación para esclarecer los hechos.