El Ayuntamiento y diferentes asociaciones han organizado diferentes actos y actividades para recordar los bombardeos del 37
DURANGO | En unos días, el 31 de marzo, se cumplirán 86 años del fatídico día que la localidad fue bombardeada. Murieron entre 248 y 336 personas. La mayor parte de estos civiles murieron cuando se encontraban asistiendo a los oficios religiosos celebrados a primeras horas de la mañana. Aunque han pasado decenas de años los recuerdos siguen estando muy presentes en la memoria de muchos durangarras.
Por ese motivo, un año más, El Ayuntamiento de Durango conjuntamente con asociaciones de la localidad han organizado diferentes actos y actividades para recordar aquel día. “Se trata de una programación con el objetivo de recordar el bombardeo fascista que sufrió la localidad en 1937”, recordaron ayer en la presentación.
Así los actos arrancarán el próximo lunes, 27 de marzo con la proyección de varios cortometrajes en el Elkartegi de landako, organizado por Suargi Elkartea. En el mismo se darán a conocer las crónicas de los bombardeos sufridos por la población de diferentes ciudades del norte de Siria. Ese mismo día se inaugurará una exposición bajo el título “Martxoak 31: Durango, atzo eta gaur”, con fotografías que mostrarán los lugares dañados por el bombardeo y que permanecerá abierto hasta le próximo dos de abril.
Espacio para el recuerdo
Será el próximo jueves, 30 de marzo, cuando continúen los actos de la programación con la inauguración del memorial en recuerdo y homenaje a las personas inhumadas en fosas comunes. Se trata de un nuevo espacio, creado por el artista vizcaino Jesús Rodríguez Jauregui y que rendirá un homenaje a aquellos fallecidos que fueron trasladados al cementerio de la localidad y enterrados en fosas comunes, quedando en el olvido. Según diferentes documentos, fueron 84 cadáveres. De todas formas, y aunque se tiene constancia gráfica de la presencia de los restos, el año pasado la Sociedad de Ciencias Aranzadi realizó una prospección en el cementerio en la que no se detectaron restos.
Al día siguiente, 31 de marzo, cuando viene siendo habitual, dos toques de alarma, el primero de ellos a las ocho y cuarto y el segundo a las cinco menos cuarto, recordarán los dos ataques que sufrió la población civil de Durango. Será a la mañana cuando también se encienda un fuego en recuerdo de las víctimas y a la tarde tendrá lugar una ofrenda floral de la mano de Gerediaga Elkartea y Kriskitin Dantza Taldea.
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