Kike Cavite, presidente de Animalien Lagunak, confirma que «están en buen estado y sin ninguna patología»
AMOREBIETA | El zornotzarra Kike Cavite, presidente de Animalien Lagunak, entidad que se encargar de ayudar a animales maltratados, abandonados o heridos, se ha llevado una nueva sorpresa. Si la semana pasada le dejaban en el buzón de su casa un gatito de recién nacido que apenas llegaba a los 103 gramos de peso, el pasado martes tenía que atender a cuatro nuevos gatos abandonados en la calle. «Una persona me llamó diciéndome que estaban metidos en una caja. Están sanos, no tienen ninguna patología y tenían el cordón umbilical quitado y todo limpio. Todo parece indicar que ha sido alguien que no puede hacerse cargo de ellos y me los dejan a mí. Yo mientras no los maten, sigo sin enfadarme del todo. Aprovecho para recordar que la madre en el momento que ve a alguien tocar o acercarse a su gato muchas veces lo rechaza. Cuando una gata está con sus crías hay que dejarles tranquilos y evitar cualquier contacto con los recién nacidos”, recomienda nuevamente el experto en animales para evitar este tipo de abandonos.