Los vecinos en procesión trasladarán a este santo desde Andra Mari hasta el santuario de Urkiola
ABADIÑO | Se acerca el próximo sábado 26 de agosto, último sábado del mes, y en Abadiño se preparan para una de las tradiciones más arraigadas de la localidad. Serán numerosas las personas que respondan a la llamada rogativa de Urkiola. Aunque la fecha en la que tiene su origen este acto no se conoce con exactitud, parece que su celebración comenzó en un año en el que una plaga afectó a los campos de los caseríos, que recogieron una mala cosecha con todas las pérdidas que ello conlleva. Como consecuencia, un grupo de residentes acordó trasladar a San Roque hasta el alto de Urkiola, para rogar al santo que recuperara los cultivos, una tradición que se mantiene año tras año.
Los actos, organizados por el Ayuntamiento, junto a un grupo de vecinos y vecinas de Andra Mari, darán comienzo a las nueve de la mañana en el barrio abadiñarra donde descansa la imagen de San Roque. Los vecinos en procesión trasladarán a este santo desde Andra Mari hasta el santuario de Urkiola, donde se oficiará una misa. Coincidiendo con esta tradición, el Ayuntamiento de Abadiño organizará de nuevo este año la salida y comida popular para jubiladas y jubilados del municipio. Así, está previsto que el autobús salga de Muntsaratz a las 10:20 horas y tendrá paradas en Zelaieta y Traña-Matiena. A las 14:00 horas tendrá lugar en Urkiola la comida popular con las jubiladas y jubilados del municipio, a la que asistirán integrantes de la corporación abadiñarra.
Las personas que tomarán parte en el acto tuvieron la oportunidad inscribirse el pasado mes de julio. Además, como todos los años, este año también se celebrará también el tradicional “Guisote” popular en el parque de Gaztañodi, el mismo sábado 26 de agosto, a partir de las 20:00 horas, –en caso lluvia será en el Probadero–, y habrá romería. En esta ocasión en la Mediatekahasta el 22 de agosto. El dinero que se recaude se donará al Banco de Alimentos. “Se trata de un precio simbólico, 1 euro por persona, que nos va a permitir gestionar mejor este evento. Se podrá ajustar la cantidad de comida y disponer el espacio óptimo para todas las personas que se inscriban”, explicaba hace unos días la concejala de Bienestar Social, Edurne Maguregui.
