Maristak Ikastetxea ha sido el primer centro el probar las bicicletas eléctricas cedidas por la Mancomunidad tras el acuerdo con Orbea

DURANGALDEA.- Para seguir incentivando y fomentando el uso de la bicicleta en la comarca, la Mancomunidad de Durangaldea y Orbea rubricaron el pasado mes de septiembre un acuerdo por el cual se comenzarían a ceder varias bicicletas a entidades de Durangaldea para sus desplazamientos diarios. En concreto, Orbea, una de las empresas ya acreditadas con la certificación CFE, Cycle Friendly Employer, puso a disposición de las organizaciones que son parte de este proyecto seis bicicletas eléctricas y la Mancomunidad de Durangaldea es desde entonces quien se ha encargado de gestionar la cesión de las bicicletas a las entidades certificadas y de recoger y tratar los datos personales de los participantes, así como los datos sobre los recorridos trazados durante sus desplazamientos laborales. En este sentido, el primer centro en testear los recorridos de su día a día ha sido Maristak Ikastetxea. En las últimas semanas el centro durangarra ha podido realizar diferentes desplazamientos para poder recopilar información y seguir avanzando en el uso de la bicicleta como medio de transporte para trayectos cortos y sin grandes dificultades.

El ente mancomunado presidido por Mireia Elkoroiribe sigue firme en su compromiso para seguir fomentando el uso cotidiano de la bicicleta como medio de transporte alternativo en la comarca. “Queremos seguir identificando e incentivando el uso cotidiano de la bicicleta en Durangaldea para ir al trabajo o a estudiar y así contribuir a una movilidad más activa, saludable y sostenible. Necesitamos saber con qué problemas nos encontramos en nuestros desplazamientos diarios y en base a eso poder seguir mejorando y adaptando nuestro entorno a este medio de transporte”, apuntaba Mireia Elkoroiribe, presidenta de la Mancomunidad de Durangaldea.

Durante la jornada ‘Test Days Durangaldea 2021’, que ahora comienza a ver sus frutos, diferentes ponentes expusieron su experiencia sobre las dos ruedas y en concreto se habló de los beneficios de las ebikes, o bicicletas con asistencia al pedaleo que poco a poco se están consolidando en las ciudades. Se trata pues de una movilidad sostenible y saludable que reduce considerablemente el esfuerzo físico del usuario mientras pedalea, permitiendo realizar con comodidad los trayectos cotidianos como los de ir al centro de trabajo o de estudios.

Pero además de subrayar las ventajas sobre el uso de las bicicletas, también se debate sobre la necesidad de tener unas infraestructuras acordes a este tipo de desplazamientos y de diferentes elementos y sistemas de seguridad. Y es que quien se desplaza en bicicleta sabe lo que significa una señal de Stop en cuesta, los bidegorris que se acaban sin previo aviso, los cruces de carretera en un carril bici, la falta de preferencia sobre otros vehículos y una mala convivencia vial. “Son aspectos que se pueden ir mejorando gracias al intercambio de conocimientos y experiencias de las personas usuarias y cuya información será vital para que en el futuro las instituciones puedan seguir creando y adaptando los espacios en base a una movilidad ciclista y un desarrollo urbano sostenible”, explica Elkoroiribe.

Tras la experiencia recopilada con Maristak Ikastetxea próximamente serán otros los municipios que seguirán sumando kilómetros con estas bicicletas.