Los zornotzarras piensan en el siguiente choque en Lezama ante el Mirandés
FUTBOL | Los azules no podían sumar en su visita al Real Racing Club, en un partido correspondiente a la jornada 5 de LaLiga Hypermotion. El Sardinero presenciaba un encuentro igualado, en el que los cántabros se adelantaban muy pronto y sabían frenar los ataques de los zornotzarras, que realizaban un gran esfuerzo en busca del gol, pero no era posible. Tras dos choques a domicilio, toca pensar en la siguiente cita, que será en Lezama ante el CD Mirandés.
El partido no comenzaba bien. Y es que el Racing salía mejor y se adelantaba en el minuto 10 por medio de Andrés Martín, que no perdonaba en el mano a mano contra Magunagoitia. Los azules iban tomándole el pulso al encuentro, con posesiones cada vez más largas. Núñez y Dorrio buscaban hacer daño con centros desde la derecha, pero no hubo manera de poner en apuros serios a Ezkieta. Lo intentaba Dorrio con un disparo desde el borde del área que salía centrado. Al Racing también le ha costaba crear ocasiones a partir del 1-0. En la única reseñable, Magunagoitia metía el guante para desviar el tiro de Arana, aunque la acción quedaba invalidada por fuera de juego. Así, el duelo se iba al descanso con ventaja mínima para los santanderinos.
La primera oportunidad de la segunda mitad era para el Racing, tras una clamorosa falta sobre Etxeita no señalada. El contragolpe lo culminaba Vicente con un tiro que impactaba en la madera. Los azules buscabanla igualada y a punto de encontrarla estaba Dorrio con un lanzamiento de falta que obligaba a estirarse a Ezkieta. Una de las peores noticias del partido la protagonizaba Javier Avilés, que poco después de entrar al campo era derribado y sufría una lesión en la zona del hombro que no le permitia seguir en el verde.
Los azules estaban cerca de empatar en el 77 mediante un latigazo de Carbonell que se topaba con una gran parada de Ezkieta. Acto seguido, un centro envenenado de Morci no lo remataba el debutante Da Graca en boca de gol por milímetros. Los de Haritz Mujika lo daban todo y no han dejado de intentarlo hasta el final, pero no han obtenido recompensa en El Sardinero.