Le conoció cuando tenía nueve años, siente una gran devoción por el deportista fallecido

DOT KIROLAK.- Se trata de una bonita historia de un niño, Jesús y su héroe, Joseba Kerejeta. Un trabajo realizado por Francisco José Martínez Cañadas, vocal del Club Pescasub Almeria y que en las últimas horas se ha hecho viral.
La historia narra cuando Jesús, un niño de Almeria de cinco años comienza a sentir devoción por la pesca submarina y con nueve conoce, a su «héroe», tal y como él define al durangarra Joseba Kerejeta, fallecido hace dos años. Este niño es un enamorado de la pesca submarina y consigue conocer a su ídolo tras una sorpresa que le dan en casa de un amigo, Diego. En la actualidad él tiene once años y este deporte le apasiona. Señala que conoció a Joseba mientras veía vídeos de pesca submarina y siempre quiso parecerse a él. «Siente devoción por el deportista durangués».
«Yo empecé a conocer el mundo de la pesca submarina porque mi padre era pescador submarino y me quiso enseñar lo que era el mar.Cuando yo entre en el agua, me metí con las gafas en el agua, fue un momento superbonito, vi el fondo marino, los peces, me gustó mucho. A lo largo de los años mis padres me fueron comprando cosas de buceo y pesca, las aletas, las gafas, un traje…me encanta la pesca submarina», señala el niño. Sobre Joseba añade que «me di cuenta de que era una persona buenísima, divertida, buen pescador. Me gustó mucho, le vi algo que en otros pescadores desde los vídeos, no percibía, y me gustó desde siempre».
La sorpresa llegó cuando su padre le llevó a casa de un amigo, Diego, un gran amigo de Joseba y gran pescador submarino de Almeria, «cuando lo vi en directo, me emocionó mucho porque lo vi y nunca pensé que lo vería. Lo que me dijo Joseba, fue que estudiase mucho, que hiciera mucho deporte y que tuviera mucho respeto por el mar. Charlamos, hablamos mucho, nos hicimos muy buenos amigos, y ahí creció una amistad muy bonita. Cuando salí de allí no me lo creía».

Es tanta la admiración que siente el niño que tras el fallecimiento, en abril de 2016, el niño decidió escribirle esta carta:
“Hola Joseba, hoy me he enterado de una mala noticia que me ha dejado muy triste.
Dice mi papá que nos has dejado y la verdad, no me lo creo, porque para mi tú siempre estarás ahí pescando y pillando esos peces tan grandes como el de la foto que me regalaste, que por cierto, la tengo colgada en mi habitación.
Recuerdo el día que Diego nos presentó. Fue el mejor día de mi vida ! y que sepas, que sigo al pie de la letra! todos los consejos que me diste! Aunque lo de correr no lo llevo muy bien, prefiero bucear…
Quiero decirte una cosa, para mi, siempre estarás en mi corazón y cada vez que hago una inmersión sé que tú estarás ahí para ayudarme a que todo me salga bien y que pueda llegar a ser un día tan bueno cómo tú, aunque éso no será fácil, pero con tu ayuda sé que lo voy a conseguir».
Hay historias que no deberían dejar de ser contadas. Gracias Jesús por compartir un trocito de tu gran corazón, y gracias Francisco por permitir que esta historia nos emocione, y nos recuerde el poder de la amistad, la admiración, y la grandeza del ser humano.
Encantados desde el Club de Actividades Subacuaticas La Espera el haber sido el vehículo de propagación de tan bonita historia para que os llegue a todos vosotros.