También se ha organzido una charña y una tertulia para el 29 y 30 de noviembre

ELORRIO | Las intensas lluvias del 26 de agosto de 1983 golpearon duramente Euskal Herria. Bilbao y el valle del Nervión fueron las zonas más afectadas, aunque no las únicas. Las inundaciones también causaron importantes daños en Elorrio y este año, cuatro décadas después de aquel suceso, tres asociaciones de la localidad han unido sus fuerzas para hacer un ejercicio de memoria.
Mila Villa Gallastegi, de Laumunarrieta, explica que, cuando empezaron a mover el tema, consiguieron reunir varias fotografías de entonces. A continuación se dirigieron a la hemeroteca de la biblioteca Bidebarrieta de Bilbao: «Cogimos allí algunos artículos publicados en La Gaceta del Norte y El Correo, donde entre los pueblos afectados también citaban a Elorrio. También hemos revisado los libros de actas del Ayuntamiento para saber cómo lo trataron en los plenos, ya que en los días posteriores al suceso hubo plenos extraordinarios para dar respuesta a los daños causados. Y claro, hubo muchas peticiones de indemnizaciones por parte de la ciudadanía».

Una vez recopilados los documentos gráficos y textuales, le han dado forma organizando una exposición en Iturri, que permanecerá abierta hasta el 5 de diciembre. Además, en su afán por seguir alimentando el archivo, quieren recoger nuevas aportaciones de los y las elorriarras; para ello han habilitado unos números de teléfono en la propia exposición.
También han organizado sendas ponencias y tertulias relacionadas con el tema. La primera tendrá lugar el lunes 27 a las 19:00 horas, donde el técnico de acción climática Iñigo Urrutikoetxea hablará sobre la conexión entre el cambio climático y las inundaciones. El segundo será el día 29, a la misma hora: «Juntaremos a los y las protagonistas de entonces, las personas afectadas, los y las representantes municipales, ayudantes, fotógrafos… Y cada protagonista contará sus vivencias: qué hicieron, dónde estaban, las reacciones de sus allegados y allegadas… recuerdos de ese tipo «.
Villa ha dejado el siguiente testimonio, destacando que tras la riada se introdujeron cambios para evitar que se reprodujera una catástrofe similar en la localidad: «Se tomaron medidas para encauzar el río Zumelegi y reordenar la zona urbana. Recuerdo que el aparcamiento que hay junto a la plaza antes era un jardín. Estaba protegido con un gran muro, pero cayó por las inundaciones. Por seguridad, decidieron tirar todo el muro. También ampliaron mucho el camino de la calle Urkizu, que va desde la plaza al polideportivo«.